Durante 37 horas ininterrumpidas, un pozo de petróleo ha estado vomitando crudo en el Ártico de Rusia. Más de 2.000 toneladas han contaminado unos 8.000 metros cuadrados, por fortuna, lejos de la costa. El accidente se ha producido en el yacimiento de Trebs, uno de los más importantes de Rusia, en el distrito autónomo de Nenetsia, cuando unos obreros intentaron reabrir un viejo pozo.
Para los ecologistas, esta fuga ilustra el peligro de las explotaciones de hidrocarburos en el Ártico. El pasado agosto, el gigante del petróleo ruso Rosneft y el estadounidense ExxonMobil firmaron un acuerdo estratégico para explorar el Ártico ruso. Video reportaje Euronews
Una vergüenza, y dicen "Afortunadamente lejos de la costa" como si la distancia fuera a evitar el desastre. Ahora queda ver quien se hace cargo de su limpieza. ¿Un gobierno dudoso como el ruso? o unas empresas solo preocupados por sus ganancias? Una lastima.
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Una vergüenza, y dicen "Afortunadamente lejos de la costa" como si la distancia fuera a evitar el desastre. Ahora queda ver quien se hace cargo de su limpieza. ¿Un gobierno dudoso como el ruso? o unas empresas solo preocupados por sus ganancias? Una lastima.
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